El adiós a una leyenda, Don Narcís Oriol Quintana, el alma de Industrias Oriol.

Industrias Oriol 1942 ha comunicado el fallecimiento de su fundador, Don Narcís Oriol Quintana, a la edad de 98 años. Con su partida, no solo se cierra un capítulo irrepetible en la historia de la empresa, sino que se consolida un legado imborrable que seguirá guiando a las generaciones futuras y a todo el equipo que forma parte de la familia Oriol.

La historia de Industrias Oriol 1942 está indisolublemente ligada a la figura de Don Narcís, un hombre hecho a sí mismo, visionario, cuyo ingenio, tenacidad y espíritu emprendedor dieron forma a uno de los grupos empresariales más emblemáticos del sector profesional de peluquería, estética y cosmética en España y Latinoamérica.

Desde muy joven, Narcís Oriol mostró su determinación y creatividad. Nacido en Celrà (Girona), fabricó sus primeras pinzas para el cabello con solo 15 años, vendiendo su bicicleta para adquirir su primera prensa manual. Este primer paso marcó el inicio de una carrera imparable dedicada a la innovación y la excelencia.

Durante los años 50, una década clave en su vida, se casó con Carmen y continuó innovando con nuevos productos, como peines de aluminio hechos a mano, poleas con motor y sistemas de producción avanzados. En los años 60, inició la fabricación de cepillos y estableció una relación con la firma alemana Zahoransky, incorporando tecnología puntera y registrando varias patentes de cepillos y peines, lo que consolidó a la empresa como referente en el sector.

La expansión internacional llegó en los años 80, cuando sus hijos, Narcís y Miquel, se incorporaron al proyecto, dando inicio a la segunda generación familiar al frente de la empresa. Juntos, abrieron nuevas fronteras, comenzando la expansión en mercados como Francia e Italia. En los años 90, se inauguraron nuevas instalaciones y nació la marca de estética Pollié, intensificando la presencia internacional en Europa, América Latina, Japón y otros mercados.

Incluso con casi 80 años, Don Narcís no dejó de soñar ni de trabajar. Fundó la filial argentina y realizó más de 200 viajes a Buenos Aires, consolidando la presencia del grupo en América Latina. En la década de 2010, con la tercera generación ya incorporada, Industrias Oriol 1942 superó las 3.000 referencias y está presente en 71 países, con una nueva línea de cosmética profesional y un laboratorio propio.

Don Narcís Oriol Quintana fue un hombre íntegro, generoso, humilde y profundamente familiar. Su vida estuvo guiada por el esfuerzo constante, la honestidad y una pasión inconfundible por el trabajo bien hecho. Con su visión y entrega, convirtió a Industrias Oriol 1942 en un referente de calidad, innovación y cercanía en el sector profesional.

El legado de Don Narcís va mucho más allá de lo construido: vive en los valores que dejó, en cada decisión tomada y en el vínculo humano que supo tejer con todos los que formaron parte de su camino. Desde la compañía, agradecen las numerosas muestras de cariño y respeto recibidas. La figura de Don Narcís Oriol Quintana seguirá siendo la brújula que guíe el rumbo de Industrias Oriol 19421.

Descanse en paz, Don Narcís Oriol Quintana. Su ejemplo y su legado permanecerán eternos.